Opinión
Mikel es un hombre atormentado que acaba de salir de la cárcel. Al contrario que otros en su situación, su objetivo no es recomponer los pedazos de su vida y volver a empezar, él sólo tiene un meta: la venganza. Cuatro años antes la mujer que más había amado le traicionó, sumiéndolo en el infierno de vivir encerrado entre cuatro paredes y sólo sostenido por los recuerdos. Ahora, con ayuda de la única amiga que ha mantenido de su vida anterior, Begoña y del amigo que le proporciona una casa y los medios para llevar a cabo su venganza, Rodrigo, se dedica a perseguir a la mujer, que a pesar de todo no ha podido olvidar por las calles de Bilbao.
Mikel es un personaje atormentado por su pasado. Su dolor es tan grande que sólo la venganza le sostiene en pie. Para poder evadirse de su situación y no desear la muerte, se ha centrado en ella, de tal manera que aunque se le ofrece poder vivir una nueva vida, no la quiere. Y esa venganza se centra en Ane, la mujer que le arrebató el corazón para luego romperlo. Aunque al principio tiene su plan muy claro, el volver a verla hace que el paso que supuestamente hay entre el amor y el odio se desdibuje para él y que tenga que luchar entre su cabeza y su corazón.
Ane, fue policía de la brigada de Estupefacientes, aunque ahora se dedica a la decoración junto a su socia Lourdes. Podría parecer feliz, tiene un trabajo que le gusta, buenos amigos, e incluso podría tener un gran amor, ya que su antiguo comisario Carlos, está enamorado de ella, pero nada más lejos de la realidad. Cada sábado la decoradora acude a una cafetería para rememorar lo que perdió y nunca podrá recuperar, el amor más profundo que ha sentido. La melancolía de sus visitas a aquel lugar, se ve interrumpida cuando Mikel, el único hombre que la ha hecho feliz aparece de nuevo en su vida, pero la mira con tanto odio como amor tuvo antes. Sabe que él nunca la podrá perdonar pero aún así trata de ayudarlo, aunque sólo le quede el consuelo de tenerlo cerca de nuevo.
Acabo de leer Antes y después de odiarte y me ha encantado. La verdad es que el anterior no lo he leído ya que llevo tiempo sin leer, pero Ángeles llamó mi atención en el encuentro de la Coruña cuando explicó su manera de escribir los libros y me animé a hacerme con esta historia. Mi conclusión es que me ha impresionado. Si buscáis un libro ameno y fácil de leer, ésta no es la mejor elección, pero si buscáis un libro profundo lleno de sentimientos, donde el odio y la angustia se entremezclen hasta poder casi palparlas habéis dado en el clavo. Hacía tiempo que no me emocionaba tanto con un libro. Me lo habían definido como un libro duro pero no lo entendí hasta que empecé a leerlo.
El tormento de Mikel te crea una especie de nudo en el estómago desde la primera página. A medida que se ve atraído una y otra vez hacia Ane, y el conflicto que tiene consigo mismo por necesitar verla a pesar del odio tan inmenso que le tiene te va introduciendo en la trama, de tal manera que no puedes dejar de leer. Para mi la autora ha hecho una labor con los personajes alucinante, sobretodo con el protagonista, intercalando lo que siente ahora con sus recuerdos, inclinándose peligrosamente entre distintos sentimientos sin saber hacia donde tirar.
Si tengo que decir algo que no me ha gustado diré un problema que supongo que ha tenido que ver con la edición, que no se separe bien los hechos presentes de los recuerdos de ambos, lo que a veces causa un poco de lío. Por el resto me ha resultado una novela apasionante, emocionante y profunda, que sin duda merece la pena leer.
